Remueven últimos vestigios del Cine “Santa Ana” por remodelación

Por remodelación y ampliación de sucursal de electrodomésticos, fueron removidas las últimas estructuras que conformaban anteriormente el Cine “Santa Ana”, un icono entrañable para la ciudad que ahora solo se preservará en la memoria de sus habitantes.

La remodelación de esta sucursal comenzó desde hace un año, pero debido a retrasos e imprevistos, hasta hace dos meses es que se comenzó con la remoción de las antiguas estructuras, así como la ampliación del inmueble, ubicado entre las calles Ignacio Picazo Norte y Centenario en Santa Ana Chiautempan.

Cine Santa Ana

Cabe mencionar que tiene poco más de quince años que el cine Santa Ana dejó de funcionar y su espacio fue ocupado por lo que hoy es Elektra, sin embargo, los pobladores de antaño narraban historias y buenas experiencias en dicho recinto.

Su construcción fue orquesta por el empresario oriundo de esta comunidad, Enrique Temoltzin Rocha, y se inauguró en el año de 1962 como una promesa de un cine que se equipararía con los de las ciudades más grandes como Puebla y México.

Foto Vía: Tlaxcala Antigua

Dentro de su arquitectura, que fue considerada como novedosa y lujosa en ese tiempo, contaba con una pantalla de 35 metros de ancho, con capacidad para entretener cómodamente a dos mil 400 personas, con dos plantas de sanitarios y fuente de sodas.

Las películas que se proyectaban eran las más exitosas y podían ser apreciadas mediante un proyector novedoso, mientras el filme era revelado ante la audiencia a través de un juego de cortinas con si fuese una magna obra de teatro.

La vida de este cine en funcionamiento perduró por casi 40 años, hasta que diversas circunstancias aún no concretas hicieron que éste cerrara sus puertas al público.

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El inmueble fue conocido como un cine por las nuevas generaciones gracias a los relatos de los abuelos y los padres.

No sólo se le consideró como una joya que hasta el día ha sido inigualable, sino que además fue un icono que recordaba la época de oro de una ciudad, pues a la par que se fueron extinguiendo las fábricas de sarapes, también vio su fin el antiguo Cine “Santa Ana”.

Texto y Fotos: Melisa Ortega

Fuente: El Sol de Tlaxcala