*Yajaira Mariana Gómez García, Titular de la Zona Arqueológica, Detalla los Esfuerzos por Preservar los Murales y Basamento
Mediante un comunicado, Yajaira Mariana Gómez García, la titular de la Zona Arqueológica de Cacaxtla-Xochitécatl, destacó la importancia del microclima y la calidad del suelo en la conservación de los murales y el basamento del sitio arqueológico. Además, resaltó el compromiso del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en la preservación de este invaluable patrimonio cultural.
Desde 2019, el INAH, a través de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural (CNCPC), ha estado llevando a cabo el Proyecto de Conservación de Bienes Culturales Muebles Asociados a Inmuebles Arqueológicos en la Región Centro Sur-Golfo de México. Este proyecto está a cargo de las restauradoras Dulce María Grimaldi y Mónica Vargas, con el apoyo del Centro INAH Tlaxcala, bajo la dirección de las restauradoras Ilsebil Alatiel de la Mora y Claudia Jazziel Lumbreras.
Uno de los aspectos fundamentales de este proyecto es el análisis constante de los componentes de los murales y el monitoreo continuo del estado de conservación de las pinturas. Este seguimiento meticuloso permite identificar posibles alteraciones, como la degradación del color, y tomar medidas preventivas a tiempo.
Gómez García señaló que la Zona Arqueológica colabora estrechamente con la CNCPC en la realización de análisis periódicos, con levantamientos trimestrales que incluyen mediciones de humedad cuyos resultados se envían para su registro digital.
Durante julio de 2023, las cuatro restauradoras, acompañadas por el director del Centro INAH Tlaxcala, José Vicente de la Rosa Herrera, realizaron una revisión normativa exhaustiva para diagnosticar el estado de conservación de las pinturas, con el objetivo de respaldar científicamente su estabilidad.
Las pruebas recopiladas en semanas anteriores, actualmente en el laboratorio, proporcionarán resultados preliminares más específicos en octubre o noviembre próximos. Estos resultados serán cruciales para determinar las acciones a seguir, especialmente en el contexto de los cambios climáticos globales que pueden afectar la conservación de los murales.
Gómez García subrayó que, aunque el microclima ha sido favorable, los cambios climáticos, como las lluvias torrenciales, pueden aumentar la humedad y generar preocupaciones sobre posibles goteras. Además, la acumulación de ceniza volcánica en los ductos de la techumbre del Gran Basamento representa un riesgo potencial que requiere una vigilancia constante por parte de los expertos.
En conclusión, la conservación de las pinturas de Cacaxtla es una tarea prioritaria para el INAH, ya que estas obras se consideran uno de los tesoros más importantes del arte mural prehispánico. El hallazgo, las labores de conservación y la historia de este sitio son parte integral de la comunidad de Nativitas y de Tlaxcala, conectando el pasado y el presente de esta región enriquecida por su patrimonio cultural.
