A pesar de no saber a ciencia cierta las causas del origen de la afección autoinmune, de acuerdo a los factores de riesgo, las infecciones víricas pueden ser el desencadenante, así como el consumo de la bacteria Campylobacter jejuni, presente en productos cárnicos y en excretas de animales.
E. Guzmán / 04-04-2024
Tras el registro y aumento de casos asociados al Síndrome Guillain Barré (SGB) en el Estado de Tlaxcala y que, ha devenido en cuatro fallecimientos y más de 80 casos confirmados, se suma también el registro de seis casos en Sinaloa, mismos que las autoridades sanitarias, encabezadas por el secretario de salud en dicho Estado, Cuitláhuac González Castillo, han calificado como “extraordinarios”.
De acuerdo con la página oficial de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el síndrome es una afección rara, mientras que, no se sabe a ciencia cierta el origen, pero que, lleva al sistema inmunitario atacar al propio cuerpo, siendo el factor de riesgo más habitual la infección por la bacteria Campylobacter jejuni, causante de gastroenteritis, sin embargo, el síndrome puede también contraerse después de una gripe u otras infecciones víricas, como el citomegalovirus, el virus de Epstein-Barr y el virus del Zika (https://acortar.link/0F8lUM), además de infecciones derivadas de Influenza y COVID19, Hepatitis, Linfoma de Hopkins, entre otros.
“La bacteria Campylobacter provoca entre otros síntomas diarrea (a menudo con sangre), fiebre y calambres estomacales. Las náuseas y los vómitos pueden acompañar a la diarrea. Los síntomas suelen comenzar de dos a cinco días después de la infección y duran aproximadamente una semana. Algunas personas experimentan complicaciones, como síndrome del intestino irritable, parálisis temporal y artritis. En personas con sistemas inmunológicos debilitados, como aquellas con un trastorno sanguíneo, con SIDA o que reciben quimioterapia, Campylobacter ocasionalmente se propaga al torrente sanguíneo y causa una infección potencialmente mortal”. (https://acortar.link/eFx7Hm).
A esto se suma que, en algunos casos, la vacunación puede presentar el riesgo de contraer el síndrome, en tanto la posibilidad es baja no hay evidencia fehaciente que demuestre lo contrario, pues de acuerdo con la Agencia Federal de Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en Estados Unidos, el índice de antecedentes para el SGB en dicho país es de aproximadamente 80 a 160 casos por semana, independientemente de la vacunación, sin embargo, estos datos de asociación son variables e inconsistentes en las temporadas de influenza.
“Si existe un riesgo de tener el SGB tras la vacunación contra la influenza es menor, en el orden de uno o dos casos de SGB por millón de dosis de vacunas contra la influenza” (https://acortar.link/Ln5EGq), sin embargo, si bien se puede presentar el SGB posterior a la vacunación contra la COVID-19 e Influenza, esta incidencia es mucho menor a la presentada en México para otros padecimientos, considerándose más común la presencia de casos asociados a padecimientos infecciosos gastrointestinales.
En tanto el gobierno del Estado, a través de la Secretaria de Salud (SESA), de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Tlaxcala (COEPRIST) y la Dirección Estatal de Epidemiología, realizaron operativos principalmente en establecimientos de venta de carne avícola, donde recopilaron muestras del producto, hallando en el 94 por ciento de 68 establecimientos de 27 municipios bacterias de escherichia coli, relacionada con Campylobacter, ante lo que se determinó suspender los establecimientos, mismos que de acuerdo con la información oficial, no contaban con una adecuada red de frio, además de la contaminación de la carne con la bacteria mencionada.
Por su parte la jefa de departamento de la Secretaría de Salud de epidemiología en Tlaxcala, Yuridia Meza Castilla, señaló la susceptibilidad de las personas también atiende al desarrollo de cuadros infecciosos anteriores a mostrar los primeros síntomas de la afección, teniendo en productos cárnicos uno de los principales factores de riesgo de contagio (pollo, res, cerdo, pescados), así mismo, la bacteria Campylobacter se puede encontrar en las excretas de perros y gatos, que también pueden desencadenar el padecimiento.
“Los pacientes que desafortunadamente fallecieron en el Estado, es porque llegaron a la unidad hospitalaria ya en un estado grave de la enfermedad, si identificamos los signos, síntomas y llevamos las medidas de prevención, si podemos de acuerdo al sistema inmunológico de cada paciente desarrollar la enfermedad, al darles el tratamiento de manera oportuna y con rehabilitación, pueden mejorar favorablemente”.
Mientras que, conforme al último reporte de la Secretaria de Salud (SESA) la semana número 14 que, corresponde a la semana en curso, se ha reportado solamente un caso de la afección denominada Parálisis Flácida Aguda (PFA), lo que, es significativo del resultado de las acciones del cerco epidemiológico en los que se identificó al padecimiento.
“Estas acciones incluyeron cloración de 33 pozos de agua, el análisis de 202 muestras de carne de pollo, más de 200 capacitaciones en el manejo de cárnicos para comerciantes en pollerías y la revisión constante de negocios de venta de pollo, las cuales fueron realizadas por el Sector Salud de Tlaxcala, a través de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Tlaxcala (Coeprist) y la Dirección Estatal de Epidemiología”.
