Durante el Festival Cultural Inmensidad, el panteón de la Candelaria Teotlalpan se volvió a iluminar por sexta vez consecutiva durante tres días, como parte del evento que no sólo vinculó el arte, la tecnología y el misticismo, sino que también ha involucrado a los habitantes de la comunidad.
Los días 31 de octubre, 1 y 2 de noviembre, la iglesia de la Candelaria, ubicada en el municipio de Totolac, volvió a ser el escenario para el lienzo del video mapping que reacciona a partir de la interacción entre el contacto humano con una planta, pieza por la que cabe mencionar que fue con la que se inició este festival.
En el recorrido, los visitantes se pudieron encontrar con los majestuosos árboles interactivos, a los cuales pudieron tocar y a la vez percibir los sonidos que emiten al contacto con el ser vivo que los oye mediante unos auriculares.
Además contó con tres piezas interactivas con las cuales participó la Colmena: Centro de Tecnologías Creativas Grace Quintanilla, como “Autoscopia”, una pieza diseñada para sumergir al espectador hacia sí mismo visto desde el espacio.
Así como “detector de espectros”, una pieza que utiliza el electromagnetismo para emular la sensación de la energía paranormal, y la pieza “el rumbo perdido es el de los que lo entienden”, con la cual los asistentes pudieron interactuar directamente e incluso sacarse fotos.
Incluso dentro de las actividades de la edición de éste festival se contó con presentaciones musicales y de artistas, así como también proyecciones de cortometrajes locales de Central-Doc.
Cabe mencionar que también se contó con área de alimentos instalada por habitantes de la comunidad, una Food-Truck y una barra de bebidas por parte de Mozencahua.
Texto y fotos: Melisa Ortega