El día 19 de marzo de cada año, se reconoce internacionalmente a los creadores que dan vida con sus manos a obras de invaluable riqueza y valor cultural, Tlaxcala se distingue por sus tejidos elaborados en el tradicional telar de madera, conocimientos heredados de padres a hijos y que, desafortunadamente se van perdiendo gradualmente.
Juan Ahuactzi Cruz, artesano originario de Ixcotla, comunidad de Santa Ana Chiautempan, elabora gobelinos bordados hilo por hilo con un concepto diferente, con temas culturales y religiosos mesoamericanos plasmando escenas tradicionales de México y Tlaxcala.
Algunos de sus diseños enmarcan escenas del cine mexicano como la película “La Escondida”, donde se puede observar a una mujer preparando “memelitas” en comal y a un “tlachiquero” realizando la extracción del pulque, en la Ex Hacienda Soltepec en Huamantla.
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Ahuactzin refirió que, en base a las afectaciones por la pandemia desde julio del año pasado, se vio en la necesidad de que crear cosas diferentes para llegar a las personas, ya que este sector ha sido uno de los más golpeados y que más ha sufrido por la falta de movilidad y las restricciones establecidas por los gobiernos y autoridades sanitarias.
Cada uno de estos diseños elaborados en tela automotriz industrial de uso rudo, le lleva alrededor de un mes de trabajo y los precios al público de sus productos, van desde los 100 pesos los de tamaño pequeño sin enmarcar o 200 pesos con marco y 500 pesos el gobelino grande con marco, además elabora rebozos tejidos en acrilán o algodón y morrales en telar de madera, y cojines cocidos a mano.
Por herencia de la enseñanza de sus padres artesanos, Juan ha dedicado 40 de sus 53 años al telar de madera y comenta que cerca del 90 por ciento de su familia se dedica a esta actividad, pero sus hijos han abandonado la tradición, ya que ellos se dedican a ejercer la carrera en sus diferentes profesiones, lo que le genera tristeza, ya que se pierde una parte de la identidad tlaxcalteca.
Dada la necesidad de vender sus productos, se ha visto obligado a ocupar un espacio en el parque del Zócalo de Tlaxcala los viernes, sábados y domingos, y menciona que no son bien vistos, ya que no están regularizados, ya que no pertenecen al grupo de artesanos de la Plaza Xicohténcatl, pero las autoridades han sido tolerantes.
Por último, hizo un llamado para que la gente se acerque a consumir artesanías tlaxcaltecas, ya que, además de llevarse un bonito artículo y de buena calidad, ayudan a la economía local.
Texto: Alex Camargo. Fotografías: Cámara Oscura / Noemi López – Alex Camargo
