El Gobernador del estado, Marco Mena junto con la Presidenta Honorífica del DIF Estatal, Sandra Chávez Ruelas, dieron inicio a la Colecta Anual de la Cruz Roja 2018, en el evento, que se llevó a cabo en el Patio Central de Palacio de Gobierno, se dio a conocer el esfuerzo del gobierno para fortalecer la labor de dicho organismo.
Mientras en el presídium, la interprete Miroslava Amador Muñoz, al mismo tiempo usaba el lenguaje de señas o “LSM” (Lengua de Señas Mexicano) para compartir la información con los niños con discapacidad auditiva, que asistieron al evento.
Aunque pasó desapercibida la presencia de la intérprete, las gesticulaciones que realizó reflejan la importancia del trabajo de comunicar a los jóvenes con discapacidad auditiva lo que sucedía, principalmente hecho de fomentar la inclusión de las personas con dicho padecimiento.
Miroslava Amador, pertenece a la Asociación para el Sordo de Educación Bilingüe del Estado de Tlaxcala (ASEBET), que es una asociación dedicada a dar educación a jóvenes, adultos y niños con discapacidad auditiva.
ASEBET cuenta con cerca de 30 alumnos que asisten a la escuela que pertenecen a diversos municipios como Tenancingo, Chiautempan, Cuapiaxtla y Tlaxco, incluso tienen alumnos que son originarios, por ejemplo, de San Martín Texmelucan, Puebla, o de Apan, Hidalgo, pues esta es la única escuela de éste tipo en todo el estado y en sus alrededores.
Gracias a al trabajo conjunto entre la Cruz Roja delegación Tlaxcala y la fundación Owens Corning, empresa dedicada a la manufactura de fibra de vidrio, se concluyó la escuela en el año 2017, con dos nuevas aulas para que los alumnos pudieran recibir educación dentro de mejores instalaciones, aunque aun no están concluidas.
En esta escuela se pretende fomentar la inclusión de los jóvenes que poseen esta discapacidad, principalmente por las dificultades que tienen en cuanto a la educación que recibiría una persona con todas sus facultades, pues es difícil adaptarse a un entorno que aun no está preparado para este tipo de situación.
La falta de comunicación es el principal problemática a la que se enfrentan los niños y niñas con dicha discapacidad, pues sus padres y maestros no conocen el lenguaje de señas. ASEBET ha tenido alumnos que ni siquiera estudiaban debido a esta problemática, ya que refleja la falta de atención a las personas con capacidades diferentes.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) , con los resultados de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID)2014; el 6 por ciento (7.2 millones) de la población total que habita en el país tienen una discapacidad, de las cuales el 33.5 por ciento (2.4 millones) su problema es auditivo.
La representante de esta institución destacó que la idea de ofrecer atención a niños con sordera surgió gracias a su hermana, pues se tenían que recorrer grandes distancias para que su hermana pudiera recibir la atención necesaria para su discapacidad.
Para un niño con problemas auditivos le es difícil su adaptación. En dicha escuela los padres de los niños se dieron cuenta del progreso de sus hijos como estudiantes y su desarrollo tanto personal como emocional, debido a que se utiliza su lenguaje y pueden ser entendidos.
Esta escuela ubicada en Apizaco, en la Avenida Xichoténcatl 705, ha llegado tener en total 60 alumnos, entre egresados y estudiantes, incluso algunos regresan a ella por cursos intensivos de español o para también aprender inglés, pues en el bachillerato, por ejemplo, es una obligación aprender el idioma.
También tienen la oportunidad de tener talleres de serigrafía, pirograbado y encuadernación, esto les sirve a aquellos que no quieren o pueden estudiar la Universidad, para que puedan valerse por sí mismos y no depender económicamente de sus padres.
Miroslava subrayó la falta de interés de los maestros y maestras al momento de la enseñanza a niños con problemas auditivos, pues no parecen estar dispuestos a aprender el LSM para poder brindar una mejor educación a los niños y niñas.
Ella comentó el entusiasmo sorprendente de vecinos y amigos de estos jóvenes, que han ido a aprender de los cursos intensivos de lenguaje de señas para poder comunicarse con ellos, porque les interesa más que incluso a los propios familiares.
Pese a tener el apoyo económico de la Cruz Roja con cierta cantidad de dinero para poder construir dos salones más, la demanda educativa crece, no tienen el apoyo como tal por parte del gobierno para contribuir con los proyectos de inclusión de las personas con discapacidad auditiva.
Las discapacidades representan alguna limitación física que imposibilita el desarrollo normal de una persona, pero es la indiferencia la mayor dificultad que enfrentan dichas personas para poder formar parte de la sociedad.
Texto y fotos: Melisa Ortega