En el periodo que va de 1808 a 1824, se encuentra un grupo de personas, de profundas convicciones y un ideario definido: Ramos Arizpe, Servando Teresa de Mier, Prisciliano Sánchez, por citar algunos, que son los más conocidos y mencionados, sin embargo, debemos incluir en este grupo al tlaxcalteca José Miguel Guridi y Alcocer, el cual a través de su actuación tanto en las Cortés de Cádiz (diciembre 24 de 1810- junio 24 de 1812) como en la integración del México independiente (septiembre 28 de 1821- octubre 4 de 1824), se destaca por sus propuestas en los legislativos como por su actuación ante acontecimientos que fueron trascendentes en ese momento histórico de nuestro país.
Sin duda, don Miguel, fue una figura relevante de su tiempo, por su pensamiento y sus radicales propuestas sociales.
Solo a manera de ejemplo presentaré algunos de estos aspectos que muestran lo avanzado de sus ideas y su conducta congruente, considerando que este 26 de diciembre cumple 259 años de su nacimiento ocurrido en Ixtacuixtla, Tlaxcala.
“La nación Española es la reunión de todos los españoles de ambos hemisferios” fue una propuesta de don Miguel que se incluyó en la Constitución de Cádiz de 1812, así para él los vínculos que unían a la península con América ya no se encontraban en la Monarquía sino en el gobierno, es que dejaba de formar parte del Patrimonio Real –por derecho de conquista- de la Corona para integrarse dentro de un Estado-nación con características hispanas; así se propuso un nuevo orden que va a influir en los acontecimientos de la independencia al entenderse la igualdad tanto tiempo anhelada.
El 2 de abril de 1811 se pronuncia en contra de la esclavitud y si bien no solicita su abolición si propone que se prohíba el comercio para abatir en un periodo no establecido su existencia, además de agregar que por incapacidad física o por edad los amos deberían hacerse cargo de la manutención de aquellos que ya no pudieran laborar, hoy hablaríamos de los seguros de cesantía en edad avanzada, 65 años y, de invalidez total permanente en los regímenes de seguridad social; es claro, que los diputados abolicionistas, a cuya cabeza se colocó Guridi fracasaron por lo avanzado de la idea que aún no era posible se entendiera por parte de los diputados, aún los americanos. Es un hecho, que esta propuesta es la más trascendente y de mayor impacto en materia de derechos humanos y no tiene rival en este congreso. Un tlaxcalteca, hace 200 años hablando de seguridad social.
Ya de regreso en México debemos mencionar que en el Plan de Iguala del 24 de febrero de 1821, mediante el cual Agustín de Iturbide presenta la propuesta del nuevo gobierno, en el artículo sexto se plantea la instalación inmediata de una Junta Provisional Gubernativa en sustitución del Virrey español, apareciendo como primer vocal Guridi, lo cual evidencia que era un personaje de importancia y de reconocida capacidad política. A pesar de esa cercanía con Iturbide cuando este es proclamado Emperador, el primer diputado en tomar la tribuna es don José Miguel para señalar que el Congreso no estaba facultado y que era necesario consultar a las provincias porque se contravenía al Plan de Iguala. Y digo cercanía, porque en la Jura del Acta de Independencia solamente ellos dos van a dirigir discursos, así era la confianza de Agustín de Iturbide hacia el tlaxcalteca.
Existió la propuesta de tomar en préstamo forzoso la cantidad de un millón y medio de pesos, Guridi dice lo siguiente: “…injusticia del dictamen…pues si los pueblos se comprometen á sostener el estado, es porque este le ha de defender sus propiedades: y por consiguiente, cuando el gobierno las ataca y se echa el mismo sobre ellas, desecho el pacto, quedan en perfecta libertad los pueblos para no obedecerla.”, finalmente se aprobó no tomar el dinero en consecuencia de este discurso. Sobre el problema de la falta de recursos que en ese momento ocupaba al Congreso, hace una adición en 14 de junio de 1822: “recuerdo la urgencia de sistemar la hacienda, cuya operación consiste no solo en tener de donde extraer dinero á las urgencias del estado, sino también en arreglar su administración”. No requiere explicación ni interpretación este posicionamiento.
En la Sesión extraordinaria del 24 de marzo de 1823 en la que se trató el asunto de la abdicación de Agustín de Iturbide señaló en tribuna: “la soberanía reside en la nación y no en el congreso y que por consiguiente no puede este reasumir los poderes ejecutivo y judicial. También sostuvo que el Emperador no obtiene por delegación del Congreso el poder ejecutivo, sino por la confianza que para ello depositó en él la nación”, es decir, ratifica lo que había dicho en el sentido de que Iturbide no tenía la legalidad para haber sido emperador.
Hay más de 50 intervenciones entre el 28 de septiembre de 1821 y el 3 de octubre de 1824, la primera fecha al día siguiente de proclamarse la independencia y la segunda al expedirse la primera Constitución Política del México independiente. Entre los académicos, Guridi junto con Ramos Arizpe son los ideólogos de la formación de un país llamado comúnmente México.
